Nicolás Nasisi es un joven profesor de educación física jujeño que se recibió en la Universidad Nacional de Tucumán. Estudió sin la cercanía de los afectos y el destino quiso, una vez recibido, que tuviera que volver a emigrar.
Es que después de trabajar en varios clubes locales, hace tres años se instaló en Bolivia. Y ahora ya está afrontando el mayor de desafío de su carrera profesional, al integrar el cuerpo técnico de Bolívar de La Paz, el club más importante de vecino país.
“Llegar a esta institución es un paso enorme, porque se trata de un club muy grande que cuenta con instalaciones e infraestructura de primer nivel. Es otra realidad lo que vivimos aquí, existiendo la presión lógica de todos. La exigencia también será importante, entonces, sirviendo para continuar creciendo”, dijo Nasisi en una impasse de la pretemporada.
Precisó que hace unos días arrancaron con los trabajos de base en La Paz y que el primer amistoso será en Perú mañana ante Deportivo Melgar. El partido se jugará en Arequipa, haciendo escala en Lima. “Luego tendremos otros duelos preparatorios para arribar de la mejor manera al inicio del campeonato local. El objetivo es lograr el título porque el club así lo demanda y posteriormente disputaremos la Copa Libertadores de América. Estamos ansiosos esperando el sorteo, porque estamos clasificados a la fase de grupo. Vamos a prepararnos para encarar con todo esta competencia internacional”, declaró.
El “Profe” coincidió que era positivo tener todas las comodidades para entrenar a los muchachos, contando con un Centro de Alto Rendimiento. “Está el gimnasio, la sala de recuperación, piscina, sauna, vestuario, utilería. Así se puede diagramar todo y optimizar los tiempos de los jugadores y el cuerpo técnico. También se cuenta con personal a disposición. Es un club perfectamente organizado con sus diferentes departamentos. Además posee un comedor y los días que trabajamos en doble turno, almorzamos en el propio centro. Los detalles son los que hacen la diferencia después”, afirmó convencido.
Finalmente, Nasisi indicó que el desarraigo es duro siempre, extrañando a sus padres, hermanas y amistades, “pero para alcanzar un sueño hay que aceptar los desafíos. Cuando se presentó la oportunidad de irme, no dudé un minuto. Y hoy estoy aquí feliz”, cerró.
Fuente: El Tribuno de Jujuy.