Por la octava fecha de la Liga Jujeña, se vivió un duelo intenso y decisivo en el estadio “Fausto Tejerina”, donde Atlético Lavalle venció por 1 a 0 a Atlético Gorriti en un partido clave por la clasificación a la siguiente fase del certamen.
El encuentro fue trabado, con mucha fricción y escasa fluidez en el juego, donde la “pierna fuerte” predominó por momentos por sobre las ideas. Sin embargo, el elenco visitante, dirigido por Iván Gallardo, logró sacar ventaja gracias a una jugada individual brillante de Facundo Mealla, quien en el primer tiempo desbordó por el sector derecho, eludió a su marcador y definió con categoría ante la salida del arquero Lucas Frías, que nada pudo hacer para evitar el tanto.
El 1-0 le permitió a Lavalle asegurar su clasificación a la próxima instancia, un logro que no conseguía desde hace varios años. La euforia se trasladó a las tribunas, donde la parcialidad del “general” celebró con entusiasmo el regreso a los primeros planos del fútbol local, generando un clima festivo que contrastó con el desconcierto del equipo rival.
Por su parte, Gorriti no logró encontrar su mejor versión futbolística. Mostró imprecisión, falta de ideas y poca profundidad ofensiva. A pesar del traspié, el conjunto rojo aún mantiene chances matemáticas de clasificar, aunque depende de otros resultados en la última fecha. Su futuro se definirá en la jornada final del torneo.
Cabe destacar que el campo de juego no se encontraba en óptimas condiciones, lo que dificultó el desarrollo técnico del partido y contribuyó al juego friccionado. No obstante, Lavalle supo adaptarse mejor al contexto y capitalizó su momento para llevarse tres puntos de oro.
Con este resultado, el equipo de Iván Gallardo no solo accede a la próxima fase, sino que también recupera protagonismo en una competencia donde ha sido históricamente protagonista. La ilusión vuelve a encenderse.



